Receta de la cocina portuguesa que os invito a probar. No está dentro de los platos recomendados en las dietas pero por un día podemos regalarnos un pequeño placer.
INGREDIENTES:( para 2 personas)
1 bandeja de bacalao desalado de unos 300 gr.
1 y 1/2 vaso de leche
1 bote de nata de cocinar de 200 gr.
1 cebolla
1 patata grande ó 2 medianas
30 gr. de aceite
1 cucharadita de maizena
queso rallado para gratinar
1/2 cucharadita de sal
nuez moscada y pimienta negra
PREPARACIÓN:
Poner la leche en una olla y meter el bacalao para que hierva unos 5 minutos.
Pelar y partir las patatas a taquitos para freír.
Escurrir el bacalao.
Reservar el bacalao y la leche por separado.
Poner el aceite en una sartén y calentar para sofreír la cebolla picada.
Cuando la cebolla esté pochada añadir el bacalao.
Espolvorear la cucharadita de maizena y mezclar.
Añadir la leche y remover bien.
Agregar un poco de nuez moscada y pimienta recién molida.
Freír las patatas sin que lleguen a dorarse.
Verter en la sartén la nata y mezclar.
Meter en la salsa las patatas fritas.
Cocer unos minutos para ligar sabores y espesar la salsa.
Verter en una fuente apta para horno.
Cubrir con queso para gratinar.
Calentar el horno a 180º y meter la bandeja a media altura durante 10 minutos. Luego cambiar al gratinador y mantener unos 5 minutos o hasta que el gratinado quede dorado.
Acompañar con una sencilla ensalada ya que este plato harta mucho.
