Esta es una receta muy de mi tierra. El choco es uno de los moluscos que más se utiliza en nuestra cocina. Frito, asado a la plancha, guisado, estofado, con patatas, con arroz, en paellas, con guisantes, con garbanzos (menudo de chocos), típico de Barbate, en albóndigas, en ensalada, etc...El diccionario recoge la palabra choco como una forma popular de nombrar la sepia.
INGREDIENTES:
500 gr. de choco troceado
500 gr. de alubia blancas
1 cebolla
seis dientes de ajo enteros sin pelar
1 pimiento verde
1 tomate maduro
1 cucharada de pimentón dulce
1/2 cucharadita de colorante alimentario
1 pastilla de caldo de pescado
1 cucharadita de sal
1/2 vaso de vino fino
100 gr. de aceite de oliva virgen
Perejil picado
PREPARACIÓN:
Tendremos las habichuelas en remojo durante 12 horas.
En la olla a presión ponemos las habichuelas remojadas cubiertas de agua fría.
Cuando comience a hervir se le tira ese agua y se pone agua fría nuevamente.
Al hervir de nuevo agregar agua fría y comenzar a añadir todos los ingredientes que tendremos preparados.
Los ajos enteros con piel, la cebolla pelada y partida en dos mitades, el pimiento troceado, el tomate cortado en cuartos y el aceite.
A continuación seguir agregando la sal, el pimentón, el colorante, la pastilla de caldo desmenuzada y el vino fino.
La cantidad de líquido debe cubrir todos los ingredientes.
Agregar los trozos de choco y poner a cocer con la olla cerrada durante 30 minutos.
Dejar que pierda la presión, abrir la olla y añadir el perejil picado.
Dejar reposar unas horas antes de comer para que la salsa quede espesita.
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